El celoso extremeño
- Myosotis Rowan
- 6 feb 2016
- 2 Min. de lectura

Si Shakespeare se caracteriza por ser el autor británico por excelencia de las pasiones humanas, sin duda Cervantes lo es en España. Sus novelas ejemplares son, precisamente, un compendio de todos los sentimientos humanos habidos y por haber, tanto en pechos masculinos como femeninos, pues muy alejado de otros autores de la época, sus novelas describen tanto las vivencias de sus héroes como sus heroínas, en total observancia escrupulosa de sus circunstancias y sujeciones a los usos y costumbres de la época en la que viven. "El celoso extremeño" es, hasta ahora, una de sus novelas ejemplares que más me ha gustado junto con "La gitanilla". Una delicia leer a este clásico, a este padre de las letras, cuyas obras son tan desconocidas para el español. Cervantes me hace ver, a través de sus letras, cómo ha cambiado la vida, no sólo de su época a la nuestra, sino de hace unos veinte o treinta años a esta parte. Vivimos en una sociedad de consumo rápido: comida rápida, moda rápida y hasta literatura rápida. En un mundo de best-sellers, la mayoría (que no todos) con escasa o nula profundidad contextual o psicológica de sus personajes y en el estilo, Cervantes en un oasis para parar, detenerse y beber saboreando sus palabras escritas. Sinopsis: Según Amenzúa, en la composición de las "novelas ejemplares" influyeron tres distintas épocas de la vida de Cervantes: al sentirse atraído por lo italiano; al llegar a una transición en que Cervantes aporta su agudeza psicológica, entreverándola con la invención; y, por último, al servirse de los hechos que narra y del análisis de los caracteres que crea para convertirse en espectador de la vida social... Federico Carlos Sainz de Robles.