Narciso y Goldmundo

Una vez más la increíble sensibilidad y dulzura de Hesse han vuelto a cautivarme.

Su Narciso y Goldmundo es un libro maravilloso lleno de psicología donde la trama se desarrolla de una forma mágica y lógica a la vez.

El lector no podrá dejar de emocionarse con los profundos sentimientos de ambos hombres.

Si bien en un principio la figura de Narciso queda relegada a un segundo término, es imposible no reconocerle el mérito de la vida de Goldmundo.

La trama en sí misma se centra casi exclusivamente en los sentimientos y vida del segundo y el personaje del primero, aunque omnipresente, no vuelve a aparecer hasta los últimos capítulos. Y, sin embargo, la fuerza concentrada de sus sentimientos más profundos y secretos no dejarán de estremecer al lector.

¿Alguna vez un libro os ha hablado de tal forma que casi habéis podido escuchar vuestra propia vida correr por las venas? ¿Os ha hablado un libro de tal forma que habéis tenido la sensación de haber vivido todo lo que cuenta, de estar hablando de vuestra propia vida y haber tenido la sensación de que ha sido escrito especialmente para vosotros?

Hermann Hesse vuelve a superarse a sí mismo. Sinopsis: Cuando el joven Goldmundo entra en el convento de Marienbronn poco imagina que la amistad que lo unirá a Narciso cambiará por siempre su vida de forma radical.

Narciso abre en Goldmundo puertas que han estado cerradas y que ni él mismo sabía que estaban allí. Y de pronto, todas sus prioridades cambian. Es la viva imagen de la liberación.

Echándose a los caminos y dejando atrás la vida eclesiástica que le estaba predestinada, los senderos le llevarán no sólo a una vida rica en experiencias de toda clase, sino también a un viaje a su interior, en busca siempre de una meta. Una meta que reside en su principio y en su fin.

Las teorías freudianas son la trama principal en esta novela y el complejo de Edipo de Goldmundo se desplegará ante nosotros como un inmenso tapiz en la búsqueda de su particular Madonna.