Ben-Hur
- Myosotis Rowan
- 12 may 2016
- 2 Min. de lectura

No sé cómo comenzar esta crítica a semejante lectura. Si bien en sus principios me aburrí por su naturaleza descriptiva, excesivamente descriptiva para mi gusto, lo cierto es que mucho antes de la mitad del libro, comencé a vibrar con él. Me he emocionado con la desgracia de Ben-Hur, al que puedo considerar como el héroe literario por excelencia, casi grité en el tren con la descripción de la carrera de cuádrigas; podia oír el estruendo de las miles de voces animando a sus favoritos, los esfuerzos de Judá por llevar justa venganza contra el despótico y despiadado Messala, pude oler la sangre en la arena, sentí el dolor de uno de lo competidores al estrellarse contra el muro, me dolieron las desventuras de las pobres Tirzah y su madre, y se me llegaron a saltar las lágrimas con la pasión del Nazareno vista a través de los ojos de Hur. Si en un principio creí que el libro me aburriría por conocer ya la historia a través de la película, debo decir que me equivoqué y juzgué demasiado pronto. El cine ha eliminado muchos detalles del libro que, me doy cuenta, enla historia no sólo son imprescindibles sino entretenidoss. Y de nuevo me enseña algo más: los clásicos, desechados demasiado a menudo por esa misma palabra que los describe, al hacernos creer que clásico=aburrido o a clásico=manido, es totalmente falsa y a veces nos impide disfrutar de verdaderas obras de arte. Sinopsis: La caída de una teja sobre el nuevo gobernador romano desencadena una serie de infortunios a Ben-Hur, príncipe judío: le acusan injustamente de intento de asesinato, le condenan a galeras de por vida, arruinan y encarcelan a su familia, y Messala- su amigo de la infancia y ahora al mando de una legión-es el que viene a detenerle. Aunque promete vengarse, el encuentro con Jesús de Nazaret cambia su vida. William Wyler dirigió una de las más espectaculares versiones para el cine, en la que Charlton Heston y Stephen Boyd bordan sus interpretaciones.