Gracia y el forastero
- Myosotis Rowan
- 14 may 2016
- 2 Min. de lectura

Hay veces que un libro puede ser como una tirita en una herida abierta. Éste es uno de esos ejemplos: un soplo de aire fresco en un mundo literario tan manido de todo, que parece que todo lo que se escribe es igual. Sin embargo, esta joyita encontrada en la biblioteca de mi casa, casi olvidada en un rincón, con las tapas medio rotas, ha sido todo un descubrimiento de sensibilidad y sencillez tan increíbles y de una ternura tan dulce, que por más que mil poetas hayan cantado mucho antes al desamor, al amor, a los reencuentros, a los encuentros, a los desencuentros y a la luna, parece que de sus páginas se desprende todo lo original, todo lo virgen de estas descripciones. Toda una galería de personajes de bondad tan infinita y de corazones tan grandioses y humildes al mismo tiempo, tan coherentes con sus pensamientos y hechos, que el lector no podrá por menos de emocionarse con el inocente y puro amor de Gracia y Gabriel. Sinopsis: Un pueblo perdido en la costa chilena, un adolescente soñador que huérfano de madre vive a solas con su padre en ese pueblo, el verano de un año cualquiera, la llegada circunstancial a la costa de un rígido general del ejército al que acompaña su hija, también adolescente. Serían los primeros elementos con los cuales se podría orquestar una clásica novela de amor; porque, nadie lo duda, el adolescente soñador se encontrará con la hija del general y se querrán casi de inmediato y, por supuesto, el general reprobará ese romance porque su hija, entre otras muchas cosas, ya está prometida a un joven y promisorio teniente. Entonces ella y él, que en este caso se llaman Gracia y Gabriel, tendrán que inventarse un mundo propio, comenzarán a sufrir la incomprensión de los otros y precipitarán la tragedia; el segundo detalle para estructurar una clasica novela de amor.