Redwin de la forja

Cuando mi vikingo me dijo que tenía que leérmelo, me agobió, porque tengo un montón de lecturas atrasadas, más de cien y quizás me quede corta. Con oposiciones de por medio y con otras cosas, pensé que lo mejor sería dejarlo para más adelante.

Pero, en algún momento tenemos que parar, dejar de mirarnos el ombligo, volcarnos en lo importantes y compartir cosas que le interesen a las personas que queremos. Así que me dije que siempre tendría un rato por las noches. Y como consecuencia de este pensamiento, sin duda alguna, tendré que leerme algo de lo que tenga por ahí sobre el súper héroe que más detesto: Iron Man. (Sí, pienso leérmelo, muchacho. Qué remedio ¬¬. Lo mismo al final hasta me gusta, aunque sea solo la historia).

Nada más leer las dos primeras viñetas, los personajes me ganaron. Me quedé prendada de ellos, de su nobleza y sus vilezas también, de sus fortalezas y debilidades, de sus historias. A veces me pregunto cómo he podido dejar ciertas temáticas de lado de una forma tan drástica. Cuando dejé de soñar... y eso es lo que mi vikingo me está devolviendo.

Redwin de la forja es una locura, él dice que bestial, yo digo que se queda corto, que es titánico. Es una monstruosidad de obra, preciosa, increíble, emotiva... sobre todo en la cuestión de la paternidad, llegando a echar por tierra lo ya tantas veces repetido: que el amor que siente una madre, no lo siente un padre... algo que nunca he visto justo y que, desde luego, es un pensamiento nada feminista, muy al contrario de lo que piensen muchos.

Sin duda, creo que es una de las mejores obras que se pueden leer ahora mismo en novela gráfica de lo que llevo leído, en temática fantástica, junto con Hellboy.

Para los interesados, se puede encontrar un tomo en Rara Avis.

Sinopsis:

Redwin ha aprendido de su padre, Ulrog, todos los secretos para convertirse en el mejor forjador del mundo de los enanos... Todos los secretos menos uno, cómo forjar armas. Redwin pondrá todo su empeño en apartarse de su padre, al que considera un cobarde, y aprender el arte de las armas.